La empresa de decoración IKEA ha retirado de sus tiendas el modelo de bicicleta Sladda y todos sus accesorios al
encontrar un defecto en la correa de transmisión. Además, ha pedido a
los clientes que hayan comprado cualquiera de estos elementos que los
devuelvan en la tienda más cercana. Según la compañía, este fallo en la bici podría provocar su rotura y la consiguiente caída de los usuarios.
IKEA pide a los clientes que la hayan adquirido que dejen de utilizarla
y la depositen en la tienda más cercana, donde se les reembolsará el
dinero.
También se podrán devolver todos los accesorios de la bicicleta y no será necesario entregar el ticket de compra para ello.
El fallo en la correa de transmisión ya ha provocado la caída de una
decena de usuarios, que denunciaron el defecto en una de las tiendas de
IKEA, según informa la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU).
La bicicleta Sladda
se ha comercializado en 26 países desde agosto de 2016. Según explican
en la compañía, se trata "de una medida de precaución. Por el
posible riesgo de caída en caso de rotura, el proveedor de este
componente ha aconsejado a IKEA retirar del mercado la bicicleta", a
pesar de que contaba con la homologación prevista.
Según explican en la compañía, los productos que comercializan "se someten a pruebas rigurosas y se aprueban de acuerdo con las normas y
requisitos más estrictos". La cadena sueca de muebles cuenta con un
protocolo a seguir en caso de que se encuentre algún defecto en un
determinado producto En 2016 la cadena anunció la retirada de sus cómodas Malma en Estados Unidos y Canadá tras la muerte de varios niños.
No
las retiró en España pero sí se comprometía a reembolsar el dinero
gastado a los clientes que quisieran devolver el producto. En aquel caso
IKEA advirtió que este tipo de cómodas "son inestable si no se fijan a
la pared", con el consiguiente riesgo de volcar y caer sobre el usuario.